Para muchos, comenzar bien el día requiere un ritual sagrado acompañado de una buena taza de café. Altamente conocido por sus propiedades estimulantes, su capacidad para combatir fatiga y cansancio, y su aporte de una dosis significativa de antioxidantes, podemos afirmar que una cantidad diaria de cafeína inferior a 300 miligramos, equivalente a dos o tres tazas de café, tonifican el organismo, alivia la fatiga, retrasa el cansancio y favorece las funciones intelectuales generando mayor productividad en la oficina.